En nuestra entrada del blog anterior, comentamos sobre la necesidad de conocer las capacidades de cada equipo, como la gama de controladores CompactLogix. Aunque parezca una afirmación evidente, considerar que una solución aplica a todos los retos, sigue causando problemas en los proyectos de automatización.
La serie ControlLogix, la primera de la gama Logix, se remonta al año 1999, con el primer modelo denominado 1756-L1 y también conocido como el procesador 5550. Luego de veinte años, los dos modelos en primera plana de la serie ControlLogix son el 5570 y su evolución, el 5580.
ControlLogix es un sistema modular instalado sobre un rack, para el cual es necesario además del módulo procesador, módulos de E/S, comunicaciones y una fuente de poder. Además de proporcionar un ecosistema simple, ControlLogix brinda mayores capacidades para proyectos de gran envergadura en industrias como la minería, alimentos y bebidas, o generación de energía, logrando gestionar procesos estándar y de seguridad en un mismo chasis.
El modelo 5580 representa lo más reciente en la evolución de ControlLogix, brindando un rendimiento entre cinco y veinte veces mayor que el 5570, con mayor capacidad de memoria (modelos de hasta 40 MB) y una mayor conectividad con un puerto ethernet de hasta 1 Gbps, importante para su desempeño y también para la complejidad del proceso de automatización, debido a los mayores volúmenes de información asociados al IoT industrial.
Una de las ventajas que ofrece ControlLogix, especialmente la serie 5580, es su capacidad de funcionamiento en condiciones más hostiles. Módulos como los NSE (No Stored Energy) están pensados para aplicaciones como la industria minera, donde el riesgo de ignición de gases acumulados es una consideración. Por su parte, los módulos XT (Extended Temperature) disponibles para la serie 5570 y 5580, son capaces de operar en rangos de temperaturas desde -25 ºC a 70 ºC, brindando mayor vida útil y reduciendo costos por sustituciones.
Además de las temperaturas extremas, la serie ControlLogix también está disponible con módulos con revestimiento conformado, pensados para ambientes donde la corrosión puede afectar el ciclo de vida de los equipos y la continuidad de los procesos, como son algunas aplicaciones en minería, alimentos y bebidas, papel y metalurgia.
Una de las principales consideraciones al momento de diseñar un proyecto de automatización es la fiabilidad. Hay aplicaciones donde la alta disponibilidad es clave, bien sea porque una detención puede resultar en pérdidas millonarias, debido a los largos procesos de reinicio, o porque pueden causar severos daños en la calidad del producto.
Pensando en la capacidad de anticiparse a estos inconvenientes, una de las ventajas que proporciona ControlLogix es su capacidad de redundancia, aplicada en el mismo ecosistema de desarrollo simple que los módulos estándar, Studio 5000 Logix.
Si estás pensando en sustituir tecnología existente o dar un salto en la evolución de tus procesos, en PRECISION estamos a tu disposición para acompañarte en el desarrollo de tu proyecto de automatización. No solo ponemos a tu disposición herramientas como los controladores CompactLogix o ControlLogix, sino que también te ayudamos a encontrarla solución correcta para tus necesidades.
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